Panorama general
Las elecciones son una parte fundamental de las transiciones democráticas, la descolonización y el establecimiento de acuerdos de paz en todo el mundo, y las Naciones Unidas ejercen un papel importante a la hora de proveer asistencia internacional durante estos significativos procesos de cambio.
La asistencia electoral de las Naciones Unidas se ofrece únicamente previa petición expresa del Estado Miembro en cuestión, o de conformidad con un mandato del Consejo de Seguridad de la Asamblea General. Antes de que se acuerde y ofrezca la asistencia, las Naciones Unidas evalúan las necesidades del Estado Miembro para comprobar que la asistencia está en consonancia con las necesidades concretas del país o la situación. Como ha reafirmado la Asamblea en numerosas ocasiones, la asistencia de las Naciones Unidas debería realizarse de forma objetiva, imparcial, neutral e independiente, con el debido respeto a la soberanía, al mismo tiempo que se reconoce que la responsabilidad de organizar las elecciones recae sobre los Estados Miembros. Más de 100 países han solicitado y recibido asistencia electoral de las Naciones Unidas desde 1991, año en que el Secretario General designó al Secretario General Adjunto de Asuntos Políticos como Coordinador de las Actividades de Asistencia Electoral de las Naciones Unidas, con respaldo de la Asamblea General. Los mecanismos institucionales de la asistencia electoral de las Naciones Unidas, y las entidades han crecido y han evolucionado desde 1991.
Hoy, varias entidades de las Naciones Unidas tienen mandatos relacionados con las elecciones y la ayuda electoral o participan de alguna manera en esas actividades. En este ámbito en que concurren diversos agentes, la Asamblea ha insistido repetidamente en la necesidad de una coordinación general, bajo los auspicios del Coordinador. El Coordinador decide los parámetros de la asistencia electoral de las Naciones Unidas en un determinado país y tiene también el encargo de mantener la lista de expertos electorales que pueden enviarse rápidamente para cualquier actividad de asistencia de las Naciones Unidas.
El Coordinador cuenta con el apoyo de la División de Asistencia Electoral del Departamento de Asuntos Políticos y de Consolidación de la Paz de la Secretaría de las Naciones Unidas, que le recomienda los parámetros de toda la asistencia electoral de las Naciones Unidas, de acuerdo con la solicitud de los Estados Miembros, después de una evaluación de las necesidades electorales. La División ofrece también orientación sobre el diseño de los componentes de la misión electoral o proyectos de asistencia y mantiene la memoria institucional de la Organización y la lista única de expertos. Se encarga también de la elaboración de políticas. En nombre del Coordinador, ofrece orientación política y técnica constante a todas las entidades de las Naciones Unidas implicadas en la asistencia electoral, en particular sobre políticas electorales y buenas prácticas. Cuando es necesario, la División presta apoyo al Secretario General y a sus enviados y a las misiones políticas y de mantenimiento de la paz de las Naciones Unidas en lo relacionado con la prevención y la mediación en las crisis electorales y, asimismo, mantiene alianzas electorales con otras organizaciones regionales e intergubernamentales que participan en las elecciones.
Historia y evolución
La historia de las Naciones Unidas está íntimamente vinculada con las elecciones. A finales de la década de 1940, poco después de su fundación, la Organización observó las elecciones en la península de Corea. Durante la era posterior de administración fiduciaria y descolonización, las Naciones Unidas supervisaron y observaron numerosos plebiscitos, referendos y elecciones en todo el mundo.
En el decenio de 1990, las Naciones Unidas organizaron o supervisaron elecciones y consultas populares históricas en Timor-Leste, Sudáfrica, Mozambique, el Salvador y Camboya. Más recientemente, la Organización prestó una asistencia técnica y logística esencial en elecciones muy significativas celebradas en muchos países, entre ellos el Afganistán, Burundi, el Iraq, Nepal, la República Democrática del Congo, Sierra Leona y el Sudán.
La demanda de asistencia electoral de las Naciones Unidas está creciendo, así como la duración y la complejidad de las operaciones. La observación electoral, que fue la actividad central en los primeros años de apoyo de las Naciones Unidas, ahora es poco frecuente, y la asistencia técnica ha crecido exponencialmente. La Asamblea General de las Naciones Unidas regula de cerca la asistencia, y su evolución se refleja en una serie de resoluciones desde 1991 (consulte las últimas resoluciones A/RES/70/168 de 2016 y A/RES/72/164 de 2017
Aunque la asistencia electoral de las Naciones Unidas evoluciona para adaptarse a las necesidades las circunstancias de sus Estados Miembros, continúa basándose en el principio establecido en la Declaración Universal de Derechos Humanos, que proclama que «la voluntad del pueblo es la base de la autoridad del poder público; esta voluntad se expresará mediante elecciones auténticas que habrán de celebrarse periódicamente.»
Tipos de asistencia
La asistencia electoral que prestan las Naciones Unidas se basa en el principio de que no existe ningún modelo universal, sino que los programas se adaptan a las necesidades específicas de cada Estado Miembro solicitante. Aunque a nivel internacional se ha prestado una atención considerable a las elecciones realizadas en el contexto de las misiones de mantenimiento de la paz de las Naciones Unidas u otros escenarios posteriores a conflictos, la mayoría de las actividades de asistencia electoral se desarrollan como asistencia técnica a pequeña escala.
- La asistencia técnica hace referencia a una gran variedad de conocimientos especializados a corto y largo plazo que se proporcionan a las autoridades nacionales encargadas de la gestión de las elecciones en su país. El asesoramiento y apoyo proporcionados en todos los sectores de la administración electoral se han ido ampliando a medida que se ha adquirido más experiencia y que las solicitudes de los Estados Miembros han aumentado en complejidad y especificidad. Se puede prestar asistencia técnica en numerosos ámbitos, como administración y planificación electorales, revisión de las legislaciones y reglamentaciones electorales, solución de controversias electorales, delimitación de las circunscripciones, inscripción electoral, presupuestación electoral, logística, adquisición de material electoral, uso de tecnologías, capacitación de funcionarios electorales, educación electoral y cívica, operaciones de voto y recuento, seguridad de las elecciones y coordinación de la asistencia de donantes internacionales.
- La observación electoral y otras evaluaciones responden a las solicitudes de evaluación o, incluso, validación de la integridad de un proceso electoral que reciben las Naciones Unidas. Estos mandatos tienen un carácter intrínsecamente político y, por lo tanto, siempre se basan en una decisión del Consejo de Seguridad o la Asamblea General. Son poco frecuentes y pueden servir a los agentes nacionales como instrumento adicional de ayuda para superar las crisis de confianza durante los procesos electorales. Además, proporcionan una evaluación del proceso que los órganos de las Naciones Unidas interesados pueden utilizar en sus deliberaciones futuras. Las definiciones han cambiado, aunque no los conceptos: en los primeros tiempos de la asistencia electoral de las Naciones Unidas, la Organización recibió frecuentes mandatos de «observación», «verificación» o «supervisión», especialmente en los procesos de descolonización conexos. Más recientemente, se le ha solicitado que «certifique» los procesos electorales en algunos países o que envíe un pequeño equipo de «expertos de supervisión» para vigilar el proceso electoral y preparar un informe interno para el Secretario General al respecto.
- Organización o supervisión de elecciones. Aunque es poco frecuente, las Naciones Unidas pueden ser plenamente responsables de organizar las elecciones de un Estado Miembro, como sucedió en Camboya (1992-1993) y en Timor-Leste (2001-2002). También puede suceder, si bien es infrecuente, que los expertos de las Naciones Unidas formen parte de la propia administración electoral nacional y la responsabilidad se divida entre el Estado Miembro y las Naciones Unidas, como sucedió en el Afganistán en 2004-2005 y en el Iraq en 2005. Estos casos no son más que excepciones correspondientes a determinados contextos de transición: por regla general, las Naciones Unidas ejercen una función de apoyo ayudando a la administración electoral nacional.
Solicitud de asistencia
Aunque la mayoría de la asistencia prestada responde a solicitudes de Estados Miembros, las Naciones Unidas también pueden proporcionar asistencia electoral por petición del Consejo de Seguridad o de la Asamblea General, como sucede a menudo cuando se establecen misiones de mantenimiento o consolidación de la paz que incluyen componentes electorales. Sin embargo, el Estado Miembro implicado también debe acceder a recibir la asistencia electoral de la Organización.
Las condiciones previas y las directrices de la asistencia electoral de las Naciones Unidas se describen en el anexo III del informe del Secretario General A/49/675. A continuación se detallan las directrices y los procedimientos principales:
Las solicitudes de asistencia electoral se deben formular por conducto de un órgano del Estado Miembro que esté autorizado a comprometer al Estado en acuerdos con las Naciones Unidas. Normalmente los órganos nacionales de gestión electoral no están facultados para hacerlo, pero sus solicitudes pueden ser aceptables en algunos casos. No se pueden considerar las solicitudes de partidos políticos, la sociedad civil u otras entidades.
El Estado Miembro solicitante debe enviar una solicitud formal de asistencia electoral por escrito que sea lo más específica posible, para que las Naciones Unidas puedan evaluar las necesidades de forma precisa. En el escrito se deberían indicar los actos electorales para los que se solicita la asistencia de la Organización.
Las peticiones se deben enviar al Representante de las Naciones Unidas competente en la esfera nacional o mundial (el Secretario General, su Representante Especial o Residente o el Secretario General Adjunto de Asuntos Políticos). Todas las solicitudes se derivarán al Coordinador de las Actividades de Asistencia Electoral, que es el Secretario General Adjunto de Asuntos Políticos.
Dado que muchos aspectos del ciclo de preparativos electorales (por ejemplo, inscripción electoral) tienen lugar meses, e incluso años, antes del acto electoral, las solicitudes de asistencia electoral se deben enviar con antelación suficiente. En general se admitirán las solicitudes formuladas hasta cuatro meses antes del día de las elecciones.
Una vez presentada la solicitud, la Organización lleva a cabo una evaluación que, normalmente, incluye una misión de evaluación de las necesidades en el país que realiza la División de Asistencia Electoral (DAE). El Coordinador de las Actividades de Asistencia Electoral de las Naciones Unidas se basa en el informe de dicha misión para determinar si las Naciones Unidas deberían prestar apoyo y, en caso afirmativo, de qué tipo.
Tras la aprobación del Coordinador, la entidad pertinente de las Naciones Unidas diseña y ejecuta la asistencia propuesta, de conformidad con las recomendaciones de la misión de evaluación de las necesidades y con el asesoramiento de la DAE.
Entidades de las Naciones Unidas que prestan asistencia electoral
La asistencia electoral de las Naciones Unidas es una labor en la que participa todo el sistema y que aprovecha los conocimientos especializados y las capacidades de muchos componentes de la familia de las Naciones Unidas. Algunos de estos componentes son:
El Departamento de Asuntos Políticos y de Consolidación de la Paz (DAPCP)
El Secretario General Adjunto de Asuntos Políticos y Jefe del DAPCP actúa como Coordinador de las Actividades de Asistencia Electoral de las Naciones Unidas, con el apoyo de la División de Asistencia Electoral (DAE) del DAPCP. Todas las solicitudes de asistencia electoral de las Naciones Unidas se deben remitir al Secretario General Adjunto, cuyo papel tiene principalmente dos vertientes: asesorar al Secretario General sobre las solicitudes de los Estados Miembros y velar por la prestación coherente de la asistencia electoral de la Organización. Además de su amplia función de coordinación de la asistencia electoral, el DAPCP supervisa las misiones políticas sobre el terreno que, en muchos casos, participan en actividades de asistencia electoral como parte de sus mandatos de prevención de los conflictos o consolidación de la paz.
El Departamento de Operaciones de Mantenimiento de la Paz (DOMP)
En contextos de mantenimiento de la paz y en muchos escenarios posteriores a conflictos, la asistencia se presta generalmente por conducto de los componentes electorales de las misiones sobre el terreno bajo los auspicios del Departamento de Operaciones de Mantenimiento de la Paz (DOMP). En estos casos, la DAE colabora estrechamente con el DOMP en la planificación y gestión de las cuestiones relativas al apoyo electoral de las operaciones de mantenimiento de la paz.
El Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD)
El Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) es el principal órgano de ejecución de la Organización en lo que respecta al apoyo para el establecimiento de instituciones electorales, marcos y procesos jurídicos y apoyo a las elecciones, al margen del contexto del mantenimiento de la paz y situaciones posteriores a conflictos. Gestiona entre 40 y 50 proyectos electorales sobre el terreno cada año. El PNUD colabora también con los Estados Miembros en el desarrollo de la capacidad a largo plazo, mediante entre otras cosas el afianzamiento de los órganos de gestión electoral en los períodos entre elecciones. En el ámbito local, las oficinas del PNUD en los países desempeñan un papel fundamental en la coordinación de la asistencia electoral. Además de sus actividades sobre el terreno, el PNUD realiza un importante análisis de cuestiones relativas a las elecciones.
La Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos (ACNUDH)
La Oficina del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Derechos Humanos continúa ofreciendo actividades de capacitación y asesoramiento sobre la supervisión de la aplicación de los derechos humanos en el contexto de las elecciones, apoya y organiza campañas en favor de elecciones libres de violencia, interviene en las actividades de promoción en favor de las leyes e instituciones electorales que respetan los derechos humanos y supervisa e informa sobre las violaciones de los derechos humanos durante los procesos.
Los Voluntarios de las Naciones Unidas (VNU)
El programa de VNU proporciona apoyo operativo y sustantivo crítico a las operaciones electorales de las Naciones Unidas sobre el terreno, completando la dotación de personal de dichas operaciones con profesionales experimentados, a menudo numerosos, que son desplegados para períodos muy cortos. La DAE colabora activamente con los VNU en la selección del personal para los puestos de voluntarios de las misiones electorales sobre el terreno. Las personas inscritas en el programa de VNU pueden optar a diversos puestos de voluntarios en proyectos y operaciones electorales sobre el terreno.
La Oficina de las Naciones Unidas de Servicios para Proyectos (UNOPS)
La UNOPS actúa como proveedor de servicios del sistema de las Naciones Unidas y sus Estados Miembros. La UNOPS ha prestado apoyo operativo y de otro tipo a la labor de asistencia electoral en diversos países y, con frecuencia, actúa en colaboración estrecha con el PNUD en las actividades de asistencia electoral. La flexibilidad y la capacidad de respuesta del PNUD son activos valiosos que aprovecha el sistema de las Naciones Unidas a la hora de ejecutar las actividades de asistencia electoral.
La Organización de las Naciones Unidas para la Educación, la Ciencia y la Cultura (UNESCO)
La UNESCO es el organismo especializado de las Naciones Unidas encargado de impulsar y respaldar la libertad de expresión, de prensa y de información. La libertad y la independencia de los medios de comunicación, tanto digitales como tradicionales, son esenciales para garantizar la transición hacia la democracia. Por este motivo, la UNESCO tiene por objeto fortalecer la capacidad de los medios de comunicación de ofrecer una cobertura justa y equilibrada de las actividades electorales. Mediante la colaboración con los periodistas y empleados de los medios de comunicación locales y por conducto de sus oficinas sobre el terreno de todo el mundo, la UNESCO proporciona capacitación y crea capacidad en el ámbito de la provisión de información relativa a las elecciones.
Entidad de las Naciones Unidas para la Igualdad de Género y el Empoderamiento de las Mujeres (ONU-Mujeres)
ONU-Mujeres tiene el mandato de ofrecer, mediante sus funciones de apoyo normativo y actividades operacionales, orientación y ayuda técnica a todos los Estados Miembros, a petición de estos, sobre la igualdad de género, el empoderamiento y los derechos de la mujer y la incorporación de la perspectiva de género. Promueve la igualdad de género y la participación de la mujer en los procesos políticos. ONU-Mujeres tiene también el mandato de dirigir, coordinar y promover la rendición de cuentas del sistema de las Naciones Unidas en sus actividades relacionadas con la igualdad de género y el empoderamiento de la mujer. Ofrece capacitación y asesoramiento sobre la promoción de la igualdad de género y la participación de la mujer en los procesos electorales.
Organización Internacional para las Migraciones (OIM)
La OIM, se unió al sistema de las Naciones Unidas en 2016, es la principal organización intergubernamental en el ámbito de la migración y a menudo implementa programas de votación fuera del país para refugiados, solicitantes de asilo y migrantes.
Recursos electorales
En colaboración con otros asociados gubernamentales y no gubernamentales, las Naciones Unidas han desarrollado varias herramientas que facilitan recursos útiles a los especialistas en elecciones.
Red de conocimientos electorales ACE
La Red de conocimientos electorales ACE ofrece información completa de fuentes autorizadas sobre las elecciones, fomenta el establecimiento de contactos entre los profesionales del ámbito electoral y ofrece servicios de desarrollo de la capacidad.
Fue creada en 2006 por ocho organizaciones asociadas, líderes en la prestación de asistencia técnica específica sobre gestión electoral, que son: Elections Canada, el Instituto Electoral de África Austral (EISA), el Instituto Federal Electoral de México (IFE), la Fundación Internacional para Sistemas Electorales (IFES), el Instituto Internacional para la Democracia y la Asistencia Electoral(I-IDEA), el Departamento de Asuntos Económicos y Sociales de las Naciones Unidas (DAES), el Programa de las Naciones Unidas para el Desarrollo (PNUD) la División de Asistencia Electoral de las Naciones Unidas (DAE).
- La Red ACE proporciona servicios en línea a los profesionales del ámbito de las elecciones, por ejemplo, una enciclopedia sobre las elecciones, datos comparativos sobre prácticas electorales de todo el mundo y una gran variedad de material electoral de diferentes países.
- La Red de profesionales ACE reúne en la primera red global de conocimientos electorales de la historia a especialistas y profesionales del ámbito de las elecciones de diferentes nacionalidades y con experiencias y especializaciones diversas y complementarias. La Red se apoya también en diez Centros Regionales de Recursos Electorales, que están repartidos por todo el planeta.
- El mecanismo de desarrollo de la capacidad de la Red ACE se centra en el conocimiento electoral y el intercambio de experiencias y fomenta la formación y el apoyo por pares como principios clave para desarrollar las aptitudes de los responsables de la gestión electoral.
Proyecto BRIDGE: creación de recursos de democracia, gobernanza y elecciones
Desde su creación en 2002, el proyecto BRIDGE se ha convertido en el curso de desarrollo profesional más completo del ámbito de la administración electoral. El proyecto, que surgió a raíz de la asociación entre la DAE y el PNUD en colaboración con el DEA Internacional, la Comisión Electoral de Australia y la IFES, ha sido desarrollado por oficiales electorales que tienen una amplia experiencia en elecciones en muchos países y contextos diferentes.
Hasta la fecha, más de 4.000 participantes han asistido a los cursos de BRIDGE impartidos por profesionales cualificados en más de 38 países. Cada curso de formación tiene por objeto mejorar las aptitudes, el conocimiento y la confianza de los profesionales del ámbito de las elecciones y de las principales partes interesadas en el proceso electoral, como los miembros de medios de comunicación y de partidos políticos, los observadores electorales y la comunidad de donantes
Se han incluido talleres de BRIDGE en muchos proyectos y misiones de asistencia electoral a fin de desarrollar la capacidad de las autoridades electorales y otras partes interesadas.