La Misión de Asistencia de las Naciones Unidas en Afganistán ha podido constatar que durante todo el mes sagrado del Ramadán diversos elementos antigubernamentales atacaron deliberada y conscientemente a civiles. Los asaltantes utilizaron principalmente artefactos explosivos improvisados y causaron más de 100 víctimas civiles sólo en la ciudad de Kabul, la capital del país.